Cualquier obra de teatro es siempre una experiencia que disfrutamos desde la butaca. A veces, esta posición se completa de manera sorprendente para el espectador. Y para ello, las opciones se multiplican con cada vez más originalidad. Una prueba son ‘Las noches de la suite’, ubicadas en el NH Collection Eurobuilding Madrid, exhibidas como una experiencia gastro-escénica y degustadas con la recreación de una noche de alta calidad, tanto culinaria como escénica.
El espectáculo se llama Una suite entre dos mundos y no sólo engloba una obra de una hora de duración sino los momentos previos y los posteriores con los que compartir la pieza, revivida en una de las suites del lujoso hotel. El antes incluye el recibimiento de Javier López Martínez y los riquísimos canapés elaborados por el chef Luis Bartolomé, ambos insertos como primeros protagonistas de la noche, además de variados vinos y cócteles para disfrutar a modo de aperitivo. Y el después culmina con una copa compartida con los actores para dar el broche de oro a la cita.
Así, durante el recorrido, se disfruta de la comida, de la bebida y de unas vistas inolvidables de Madrid desde la decimoquinta planta, tanto interior como exteriormente. Aunque nada de esto deslumbra y sorprende tanto como Una suite entre dos mundos, con la que inevitablemente entramos en un estado de risa constante que enseguida nos hace acomodarnos al lujo, no sólo que nos rodea, sino que contemplamos.
Carlos Silveira se ha encargado de dirigir este montaje que, a gran escala, junta dos universos alrededor de un simple sofá. Si la primera idea es que la acción va a ser monótona, enseguida nos olvidamos de ella, ya que Silveira detona una propuesta que no para quieta y entusiasma en cada nuevo trueno a modo de giro de guión. Precisamente, el texto de Juan Alfonso Padilla Cepeda y Juan Carlos Rubio Román, creado específicamente para el espacio, abre la puerta a un entretenimiento que sabe seducir por las chispas de comicidad y la rápida y oportuna declaración de intenciones; mirar, disfrutar y reír.
La diversión en cada diálogo y movimiento la ponen en práctica Alberto Amarilla, Yara Puebla, Francisco Ortiz y Carlos Baró, actores que dan vida a 4 personajes tan diferentes como convulsos. Su impronta no sólo la dejan en el sofá que sirve como eje principal sino en la confusión de acontecimientos que no dejan de vibrar en ningún momento. Quizás le falte sal a la última parte de la obra, al truco final, que parece algo suave y con falta de matices pero, sin duda, hacen que lo sobrenatural esté presente en la habitación gracias a la contagiosa habilidad del cuarteto por razonar deseos, pasiones y aventuras mortales de manera original y divertida.
‘Las noches de la suite’ es un nuevo concepto de espacio escénico y de espectáculo, innovador, genuino y vanguardista que acerca al artista a su público. Así, una obra de teatro sucede en un espacio real, la suite presidencial de un gran hotel, donde el espectador se convierte en voyeur de historias creadas para el disfrute de únicamente 50 personas. Todo ello, acompañado siempre de la alta cocina y de cócteles que hacen de la velada una noche memorable.
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«Las noches de suite » . espacio y un nuevo concepto escénico para el espectador. Se desenvuelve en una Suite Presidencial . donde pasan hermosos momentos, rodeados de ljos
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«Una suite entre dos mundo» es bueno seguir paso a paso en esta obra, para conversar comer y pasarla bien , lo bueno es saber el final que no se explicita de alguna manera.
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