LA ESCENA NÚMERO 12

Los lunes en Nave 73 vuelven a significar teatro y desde el pasado día 23, La escena número 12 es un buen ejemplo de ello. Esta obra es una propuesta que habla del teatro, desde antes de mostrar una función al público, y desde las relaciones establecidas entre las personas que son capaces de levantar el telón del escenario y de sus sentimientos, para dejarnos mirar, por un agujerito, las entrañas de todo lo que desata la pulsión humana y teatral.

Cuando nos sentamos en cualquier espacio en el que ocurre un reflejo de lo que somos a través de los ojos de algunos valientes lo llamamos teatro. Y esta parece ser la premisa que se ha tenido en cuenta para La escena número 12. Además, hablar de teatro incluido en una representación es otro de los retos de los que se alimenta esta función. Nos enseña, nos corrige y nos atrae hacia un mundo anterior que el espectador siempre se pierde y que consigue extraer las relaciones de poder, los vínculos jerarquizados de un puzzle de escenas y las relaciones personales que pueden surgir tras diarios encuentros.

Un director, un ayudante de dirección y una actriz. No hace falta nadie más para desdibujar lo que ocurre antes y después de un ensayo, ni para derribar la muralla personal, alzada a modo de gruesa línea de libros que cruzan el escenario. En el reparto están Eleazar Ortiz, Marta Matute y José Gómez-Friha (¿dónde hemos estado todo este tiempo sin conocerte?), un trío increíble sobre el escenario. No sólo saben defender sus personajes por separado sino que juntos tienen una perfecta sintonía para no malgastar ni una sola palabra dicha ni un movimiento en balde. El triángulo esbozado es impactante, así como todo lo que nos dejan ver de manera figurada y de manera más realista.

Gómez-Friha nos ofrece está versión y dirección, en las que ha tenido el cuidado de incluir a un personaje oculto, cuyo desvelo es tan inquietante como un final fantasmagórico que juega con lo que el espectador va recreando. Lo que comienza siendo un ensayo escénico, acaba siendo un ensayo personal y atrayente por igual, demostrando que una historia puede evolucionar únicamente con una buena conjunción entre actores.

Venezia Teatro se ha encargado de la producción de La escena número 12, un montaje que podréis ver los lunes hasta el próximo 20 de noviembre en Nave 73, una oportunidad única para comenzar la semana bien cargada con un pizca de suspense, otra de espionaje desde la butaca y otra de amor por un trabajo impecable.

Tras el ensayo de un montaje en un teatro público, un Director y su ayudante de dirección se quedan a solas en la sala de ensayo. A dos semanas del estreno, la relación de años entre ambos se ha convertido en rutina fuera del Arte del teatro. Esa noche aparece una actriz con una petición que cambiará el curso de los tres personajes.