Murad Osmann continúa su proyecto Follow me to

La fotografía siempre ha sido una disciplina artística sumida en la más absoluta controversia. Son muchos los que consideran que cualquiera con una cámara podría hacerlo; no obstante, nada más lejos de la realidad. La fotografía es luz, composición, enfoque y como diría Cartier Bresson es “captar ese instante decisivo” que haga de ese momento mucho más que una simple imagen.

Sin embargo, la fotografía hoy en día se ha visto sometida a nuevas formas de expresión, nuevos lenguajes que vienen dados por el uso de las redes sociales y de las nuevas tecnologías como son los smartphones, dando lugar a lo que se ha denominado “la revolución de la fotografía móvil”. Lamentablemente esto, aunque constituye un gran avance para los artistas dedicados a la fotografía, ha supuesto que muchos de ellos tengan que luchar por conservar una posición que, en ocasiones, se ve en peligro por el gran intrusismo que encontramos en esta disciplina artística. Debates aparte, el uso de las redes sociales y las nuevas tecnologías es considerado por muchos un nuevo lenguaje, pero ¿estamos realmente ante un nuevo lenguaje fotográfico?, ¿o es tan sólo una moda pasajera influida por los medios de comunicación y la publicidad? Aunque se podría afirmar que sí, existen algunos fotógrafos que han conseguido desarrollar interesantes proyectos en este ámbito, convirtiéndolos en una nueva expresión artística, y a los que se debe dar un cierto reconocimiento por su calidad y creatividad. Es el caso del fotógrafo ruso Murad Osmann, cuyo proyecto “Follow me to” comenzado en el año 2011 en un viaje a Barcelona, ha dado la vuelta al globo. Y es que la originalidad de esta serie de fotografías que el artista publica en Instagram no ha dejado a nadie indiferente.

Murad Osmann

Como el propio Murad Osmann cuenta, la idea le vino cuando su novia, cansada de esperar a que él terminara de tomar las fotos, tiró de él y la imagen se presentó ante sí. He aquí el instante decisivo del que hablaba Cartier Bresson.

Las imágenes muestran desde una mirada subjetiva, la del propio autor, a su novia de espaldas alejándose en diversos escenarios de todos los rincones del mundo. Son fotografías que se caracterizan por el uso de un fuerte contraste y por una gran plasticidad que viene dada por la composición y el color de las escenas.

Con todo, el artista ruso ha realizado otros muchos proyectos dentro del mundo de la moda, la publicidad y por supuesto en el plano artístico, donde podemos observar la altísima calidad de su obra y producción.