La nueva temporada de Nave 73 no ha podido comenzar mejor. La mañana del primer día de septiembre ha estado llena de recuerdos, alabanzas y anécdotas hacia un autor que sigue vivo en el tiempo gracias a películas como La novia, de Paula Ortiz. Federico García Lorca ha sido homenajeado y arropado en un encuentro titulado Lorca en el siglo XXI, organizado por la sala y el equipo de la película, en el que no han faltado los compañeros de profesión en torno a una película que desborda belleza y pasión por el autor granadino.
El encuentro ha comenzando con las lecturas dramatizadas de diferentes pasajes de poeta en Nueva York, La casa de Bernarda Alba y Bodas de sangre, con la entrega y la voz de Verónica Moral, Sara Gómez, Álex García y Luisa Gavasa. Asier Etxeandía, Paula Ortiz, Alberto Conejero y Consuelo Trujillo han mantenido un coloquio posterior, moderado por el periodista Mario Moros. 80 años después de su muerte, el poeta español más internacional de todos los tiempos ha sido recordado en todos los sentidos, destacando la contemporaneidad en sus textos por Conejero: “Yo creo que un clásico lo es precisamente por resultar contemporáneo a cada hombre y a cada mujer que se asome a él y por no producir intimidación sino intimidad. A Lorca hay que acercarse como se acerca al amor, a un amante. Lo pero que puede pasar es ponerle una custodia”.
Dejando a un lado el “atrevimiento” de todo el equipo por llevar al cine la historia de Lorca, respondido por todos ellos por un rotundo “¿y por qué no?”, ha habido tiempo para hablar de la temática central de la película, cuya directora explicaba así: “la fuerza de la belleza o del amor tiene el mismo peso con el dolor y la destrucción, debe ser así, y eso es lo que hace que Lorca esté vivo. La pregunta es si podemos vivir con todo ese amor, con todo ese dolor”. A su lado, Etxeandía ha defendido a su personaje como un novio que ama bien, que es fuerte y que da la oportunidad única al personaje interpretado por Inma Cuesta de tener una buena vida. Comentaba su sorpresa ante comentarios recibidos, insistiendo en que “no es una visión nueva del novio sino que así es como está escrito ya que sino, no habría conflicto”. Además, confesaba que “lo que pasa cuando trabajas algo de Lorca es que empieza a rimar todo con tu vida”.
A Trujillo, actriz y directora que casi parece llevar en la sangre las palabras de Lorca por la pasión con la que habla de él, le interesa del autor “cómo nos leemos porque cada vez es diferente. Y lo interesante de La novia es la reconstrucción que hicieron Paula y Javi del poeta, para volver a construir desde los ojos contemporáneos del siglo XXI esa Bodas de sangre”.
Sin duda, la cuestión mejor respondida la ha dejado el dramaturgo Alberto Conejero, explicando que “Federico pone en cuestión muchas heridas por cerrar en este país y por eso le necesitamos. Las cunetas están llenas de Federicos y Federicas. Yo creo que acudimos a él para ser mejores, sobre todo por su generosidad; cómo un hombre, perseguido por tantas sombras, arrojó tanta luz en diez años de creación”.
Lorca sigue siendo recordado y llevado al cine en la película La novia, ganadora de 2 premios Goya (mejor dirección de fotografía y mejor actriz de reparto) y preseleccionada recientemente para representar a España en los Oscars, y en teatro en La piedra oscura, escrita por Alberto Conejero y dirigida por Pablo Messiez, una historia inspirada en la vida de Rafael Rodríguez Rapún, compañero de Federico García Lorca en los últimos años de sus vidas.