Ha llegado a Madrid Perplejo, la segunda propuesta teatral de ilMaquinario Teatro que, tras su estreno en octubre de 2014 y con cerca de 30 representaciones en Galicia, dos en Euskadi y una en Castilla y León, se estrena en el Teatro Galileo de Madrid entre los días 9 al 19 de junio. El montaje se enmarca dentro del Festival En un lugar del ser o no ser por “su línea existencialista y surrealista” y se podrá disfrutar de jueves a sábado a las 20 h y los domingos a las 19 h y, posteriormente, seguirá en gira en Orense, Elorrio, Basauri y Valencia.
Con unos juegos escénicos que provocan la risa instantánea, estos personajes cambian de roles en cada escena y hacen que los espectadores tengan que adaptarse una y otra vez a cada nueva historia. Con la pregunta central de quiénes somos nosotros, la historia de Perplejo se desenvuelve entre máscaras sociales, relaciones cotidianas o temas sociales como el fascismo o la inmigracion, gracias a unos personajes que llevan los mismos nombres que los actores para dar más énfasis al teatro dentro del teatro.
Dirigiendo esta obra está Tito Asorey y el reparto está compuesto por miembros-fundadores de la Compañía ilMaquinario Teatro; Melania Cruz, Fernando González, Fran Lareu y Laura Míguez. A partir de los últimos textos del dramaturgo Marius Von Mayenburg, todo un referente de la vanguardia teatral en Alemania, la compañía ha construido “una comedia sobre la dificultad de encontrarnos a nosotros mismos dentro de esta sociedad tan vertiginosa del siglo XXI”.
Este montaje cuenta con el apoyo de Goethe-Institute, la Mostra Internacional de Teatro de Rivadavia y Sarea, la Red Vasca de Teatros. Perplejo ha conseguido cinco Premios María Casares y la recomendación de la Mostra Internacional de Teatro de Ribadavia. Esta obra de teatro fue estrenada en gallego y ahora llega con su versión en castellano, recién estrenada el pasado mes de febrero en Bizkaia.
Laura y Fernando vuelven a casa después de las vacaciones, pero al rato de entrar perciben en ella pequeños pero extraños cambios: una nueva planta aparece en la cocina, su gato no aparece y la luz está cortada por falta de pago, aunque unos amigos de la pareja, Fran y Mela, se quedaron al cuidado de las cosas en su ausencia. Cuando esta nueva pareja aparece en escena la situación da un giro, pues parece que ellos son los verdaderos y legítimos propietarios de la vivienda.