“Y vivieron felices para siempre…”
Son muchos los artistas que hacen de la mujer el principal protagonista de sus obras; sin embargo, no todos son capaces de transmitir la fuerza y el carácter que Daniela Edburg confiere a sus fotografías. Esta artista mexicana convierte a la mujer en el hilo conductor de toda su producción. Imágenes narrativas en las que nos encontramos a mujeres presas del consumismo actual, muriendo virtualmente víctimas de su propia obsesión. No obstante, no se trata de una crítica hacia la sociedad del momento, sino más bien de una representación de la misma.
En sus fotografías, intenta plasmar la realidad de un colectivo que se encuentra cómodo en ese papel de consumismo exacerbado y que está a gusto en esa jaula de oro que ellos mismos se han construido.
Los escenarios que utiliza para enmarcar a sus personajes respiran onirismo, son ambientes de carácter bucólico que esconden, de un modo muy sutil, la inocencia descarnada de quienes presiden la imagen en un intento de dulcificar un aspecto de la sociedad que nos afecta a todos.
Toda la obra de Daniela Edburg se caracteriza por el uso de colores brillantes y de una estética kitsch. Escenas que evocan las obras de artistas conocidos como Hitchcock o Whistler, con un tamiz fantástico que en ocasiones nos acerca al mundo de los sueños y de los cuentos tradicionales escritos por los hermanos Grimm, Perrault o Andersen.
Uno de los elementos más interesantes en la obra de esta artista son las intrusiones de objetos textiles elaborados a base de punto o ganchillo y que constituyen uno de los principales pilares simbólicos de sus fotografías. Dichos elementos aluden a la creación en un sentido destructivo frente a su creador, como si del monstruo de Frankestein se tratara. De esta manera Daniela Edburg crea un juego de contrarios entre lo cierto y lo incierto, lo real y lo imaginario etc. arrastrando al espectador al interior de su obra y obligándole así a reflexionar sobre nuestra propia naturaleza y el mundo artificial en el que habitamos.
Actualmente esta fabulosa fotógrafa, se encuentra sumergida en su serie “El musgo civilizado”, de la que podremos disfrutar en la Galería Enrique Guerrero de México hasta el 24 de octubre. Una serie en la que de nuevo encontramos lo textil como hilo conductor, esta vez, emulando un elemento vegetal: el musgo, el cual elabora la artista y con la que se puede colaborar durante este mes de septiembre y octubre en San Miguel de Allende y ciudad de México.
Daniela quiere hacernos pensar en un mundo vano y que nos destruye. Gracias DANIELA . Desde que lo natural y humano escapó de nuestras manos el mundo se volvió falso e hipócrita.
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Daniela Elburg, nos hace amablemente un relato en sus fotografía de la naturaleza humana en el momento que nos toca vivir , Nos muestra lo cierto y lo incierto , lo real y lo imaginario , lo que se ve y lo se encubre ,Usa naterial textil , resaltando lo ascentral y a manara de musgo, la naturaleza misma
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