La ilustración es el arte de comunicar a través de las imágenes. Hoy en día son muchos los ilustradores que hacen de esta comunicación el reflejo de sus ideas, pensamientos, reivindicaciones…pero son menos los que logran captar de un solo vistazo la atención del que allí mira sus obras. Paula Sifora forma parte, sin lugar a dudas,de ese grupo minoritario de artistas que realizan auténticas obras de arte utilizando como medio de expresión la Ilustración.
Llaman especialmente la atención los colores y como están dispuestos. Son colores vibrantes, alegres, llenos de vida que transmiten energía, fuerza, ilusión, y hacen de las ilustraciones imágenes divertidas, que a pesar de reflejar en ocasiones sentimientos difíciles nos llenan de positivismo. Esto es tanto por los tonos utilizados como por la disposición de los mismo. La mayoría de las piezas contienen colores amarillos, rosas y azules que combinados también nos dejan ver tonos naranjas y verdes. Su disposición parece aleatoria pero si uno se detiene a observar se da cuenta de que los colores son el reflejo del efecto que daría las luces y las sombras en la figura. Es esta labor de contraste, entre las zonas pintadas y las que no, las que le dan un plus de originalidad a esas figuras realistas, consiguiendo una antítesis entre lo abstracto del color y lo figurativo de la imagen.
Paula es una artista innovadora que no se conforma con las pequeñas cosas. Sus trabajos han nacido de ideas como la ilustración de diversas canciones, proyecto que recoge con el nombre de «dibusicados» , o en el que está trabajando ahora que ilustrará las chicas de diferentes videoclips. Para llevar a cabo todas sus obras parte de la captura de sus ideas a través de la fotografía, con la que después trabaja. Esas ideas pueden venir de cualquier situación o materia, pues son innumerables y muy diversas las influencias que toma para su inspiración.
Por todo ello, la malagueña es una ilustradora de pies a cabeza, cuyo trabajo lleno de talento y de buen hacer conquistan a todo aquel que se acerca a echar un ojo, a contemplar, a disfrutar de los ligeros trazos y los alegres colores que rebosan fuerzan y carácter.
«Ser ilustrador significa que también puedo pintar un mural en metros y metros de pared, que puedo hacer un collage o intervenir en un objeto tridimensional, todo está permitido y todo tiene un sentido, una conexión por tu estilo. En cuanto me di cuenta de eso empecé a centrar todas mis energías en aquello, que era lo que yo quería, contar cosas en diferentes soportes de una forma especial, original y personal » (frase rescatada de la entrevista realizada previamente a este artículo).
Marina P. Villarreal.
para Galería 8